INFOXICACIÓN

 

Estimados lectores, en esta circunstancia les daré a conocer un término muy interesante relacionado con las tics: INFOXICACIÓN.

La INFOXICACIÓN (información + intoxicación): hace referencia a la sobrecarga de información que es recibida por un usuario la cual le causa angustia al no poder abarcarla o gestionarla. Es decir, es el estado de contar con demasiada información de un determinado tema. El término infoxicación fue introducido por Alfons Cornella en 1996.

La infoxicación produce varios problemas como:

• la sobrecarga informativa se vuelve incontrolable
• encontramos contradicciones en la información
• no contamos con un método para comparar y procesar distintos tipos de información
• nos encontramos frente a una intoxicación.

Los problemas derivados de la sobreinformación pueden afectar nuestro rendimiento personal y profesional. Si prestamos demasiada atención a gran cantidad de información de manera sostenida y no finalizamos una tarea para continuar con otra diferente, esto dificulta la desconexión de la mente y la obliga a realizar un sobreesfuerzo. Es por esto que debemos reflexionar como nos informamos y que métodos/herramientas utilizamos para gestionar la información.

El profesor Clay Shirky aseguró: “el problema no es la sobrecarga de información, el problema es que el filtro no funciona”. Comentó que en este universo de exceso de información tendríamos que tener muy claro ¿cuál es nuestra información crítica? La información crítica es aquello de lo que no podemos estar informados, y para buscarlo debemos aprender a conocer las fuentes adecuadas y formular las preguntas correctas: ¿De qué me interesa estar informado? ¿Dónde lo busco? ¿Cómo lo busco?

Para conseguir buena información o una mejora en la productividad personal, tenemos que recibir la información adecuada. ¿Cómo sabemos que información es la adecuada? Debemos saber cuáles son los 5 temas fundamentales, los 5 temas secundarios y cuál es la lista de información crítica para c/u de estos temas:

• Información fatal: aquella que no nos interesa en absoluto ya que no tiene nada que ver con los temas que tratamos.
•   Información interesante: aquella que en algún momento puede interesarnos.
•  Información realmente útil

Según Cornelia, “Un buen objetivo final puede ser tener un filtro personal de información y dividir la información obtenida 3 grandes grupos”.

Como conclusión, podemos decir que para llevar a cabo nuestro proceso de información continua debemos tener claro cuáles son los temas que realmente nos interesan, saber dónde buscar la información  que necesitamos y cómo hacerlo, sabiendo que no toda información recibida es significativa o útil.